Después de todos los cristos
Lo ajeno, lo propio, lo sagrado, lo aparente, lo nuevo, lo inconmensurable.
El impacto, lo sensible en permanente estado de posguerra.
Todas las batallas, todas las llaves, todas las leyendas.
Todos los cielos son éstos y los infiernos.
Cada purgatorio, cada niño con nombre.
Todos los tiempos, todas las tumbas somos nosotros.
Todos los mesías, cada invención: todos esos cristos.