Es hora de hacer temblar las paredes
No hay nada más frágil que la seguridad de las paredes.
Nada más apresurado ni más lento que el ritmo de un reloj.
He visto gente que se abraza con las casas,
sin pensar que esas casas son a prueba de ellos.
Quienes saben que pueden destruir
son los primeros que buscan donde refugiarse.
Temen que en el desastre esté la construcción.
Hay hogares sin paredes y tiempo sin agujas.
Días que se levantan antes que ellos.
El temblor es el principio.
Nuestro modo de inventar.